La activista Cecilia Soriano compartió diez puntos que considera fundamentales y presentó informaciones sobre la situación asiática
Descargue acá la presentación powerpoint de Cecilia Soriano
UN Photo
A pesar de la enorme diversidad de contextos nacionales, el continente Asiático aún debe hacer frente a muchos desafíos en el ámbito educativo. En su presentación, Cecilia Soriano, Coordinadora General de la organización «Enet Phil», compartió lo que considera diez puntos clave en el horizonte del derecho a la educación en Ásia:
- Garantizar mecanismos de inclusión y apoyo a los estudiantes con discapacidades.
- Desarrollar sistemas de monitoreo para los estudiantes con riesgos de abandonar los estudios.
- Promover la concientización sobre la educación de mujeres y niñas.
- Desarrollar un programa de seguimiento para alcanzar a los marginados.
- Implantar un programa de educación preescolar para todas las personas.
- Poner fin a los cursos o las clases reunidos en un solo espacio
- Establecer más centros de enseñanza comunitarios en zonas rurales, con miras a la alfabetización y los conocimientos locales
- Aceptar a los y las niños y niñas apátridas o sin papeles en las escuelas
- Promover programas de prevención al HIV Sida a partir de abordajes integradas
- Mejorar la formación para educación en contextos de emergencia y desastres
Entre las informaciones que señaló la panelista, está que muchas personas dejan de estudiar en la medida que se ven obligadas a escoger entre pagar por la educación, o por la sobrevivencia – lo que plantea el tema de la gratuidad como algo fundamental. En ese continente, los padres y las madres contribuyen con aportes financieros para la educación de los y las niños y niñas, sea con el transporte, morrales, libros y otros costos directos o indirectos.
Otro aspecto importante que subrayó Cecilia, es la necesidad de comprender los patrones culturales y su afectación en el escenario de la educación; en las Filipinas, por ejemplo, se verifica que las niñas asisten más a las escuelas que los niños, fenómeno que es resultado de una práctica local muy tradicional, fundamentada en el derecho a la propiedad de la tierra que tienen los hombres, práctica cultural que provoca un desinterés en asistir a la escuela por la promesa de la tierra o el recibimiento de la misma como herencia de sus padres. Evidenciando así la división sexual de papeles sociales, al ser la educación para las niñas, mientras que la tierra para los niños -lo que seguramente requiere entendimientos mucho más allá de las estadísticas nacionales.
América Latina y el Caribe en la Campaña Mundial por la Educación 